Funeral de Estado por Adolfo Suárez
'Su plegaria es hoy nuestra plegaria'
"Su plegaria es hoy nuestra plegaria, la plegaria de la Iglesia de España. Es la plegaria de España. Lo confirman la presencia de los Reyes, los Príncipes, los representantes de las más altas instancias del Estado. Son el eco y el testimonio emocionado de profundos y nobles sentimientos de aprecio, estima y gratitud sinceras para con aquella persona que sirvió a los españoles en uno de los momentos más delicados. Es la nobleza de corazón de tantos creyentes que se manifiesta , sobre todo ahora, en la oración por él y, cómo no, también por España", ha asegurado Rouco Varela en su homilía.
"La concordia fue posible con él. ¿Por qué no ha de serlo también ahora y siempre en la vida de los españoles, de sus familias y de sus comunidades históricas? Buscó y practicó tenaz y generosamente la reconciliación en los ámbitos más delicados de la vida política y social de aquella España que, con sus jóvenes, quería superar para siempre la Guerra Civil: los hechos y las actitudes que la causaron y que la pueden causar".
"La forma sobrenatural de su aceptación y de su vivencia del sufrimiento en la difícil y heroica temporada de la enfermedad de su hija y de su amada esposa y en los años crueles de la propia, que él asumió enteramente, hablan de un hombre de una arraigada y profunda fe cristiana, muy consciente de que siguiendo y sirviendo a Cristo hasta la Cruz estaría con él y con sus hermanos, amando en el tiempo y en la eternidad".
"Una buena lección para los católicos de esta España de hondas raíces cristianas llamados con urgencia histórica a ser y servir de fermento de nueva humanidad en medio de sus conciudadanos, afrontando humilde y valientemente el amor cristiano con la sociedad y con el pueblo al que pertenecen", ha señalado el arzobispo en su homilía.